Mudarse a una residencia es un gran cambio para las personas mayores. A menudo conlleva estrés, miedo a lo desconocido y problemas emocionales. Como familiar o cuidador, desempeñas un papel clave para facilitar esta transición.
Cómo facilitar la adaptación
- Habla del cambio con antelación
Los mayores necesitan tiempo para aceptar su nuevo entorno. Habla pronto de la vida asistida, explícales las ventajas y escucha al mismo tiempo sus preocupaciones. Deja que expresen sus preocupaciones y emociones sin presionarles.
- Haz que se sientan como en casa
Un entorno familiar facilita la transición. Lleva objetos personales, como fotos familiares, colchas favoritas o adornos de su antigua casa. Estos pequeños detalles aportan comodidad.
- Mantente conectado
Las visitas regulares, las llamadas telefónicas y las videollamadas ayudan a los mayores a sentirse conectados. Aunque se trasladen a una residencia, siguen necesitando fuertes lazos familiares y apoyo emocional.
Estos pasos pueden facilitar la transición, pero no cambiarán una simple verdad: muchos ancianos nunca se adaptan realmente a la vida asistida. Echan de menos su hogar, su rutina y su independencia. ¿Hay alguna forma mejor?
Asistencia a domicilio: una alternativa más cómoda
Para muchos mayores, irse de casa es lo más difícil. Pueden sentirse aislados en un lugar nuevo, incluso con buenos cuidados. La asistencia a domicilio ofrece una solución diferente, que les permite quedarse donde mejor se sienten.
- Entorno familiar, menos estrés
Mudarse representa un gran trastorno físico y emocional. Quedarse en casa elimina este estrés. Un cuidador a domicilio proporciona asistencia al tiempo que permite al anciano continuar sus actividades cotidianas en un lugar que le gusta.
- Atención individual
Los centros de asistencia tienen personal para varios residentes, lo que limita los cuidados personales. El cuidador a domicilio se dedica exclusivamente a una persona, proporcionándole cuidados individuales, compañía y apoyo emocional.
- Mayor independencia y flexibilidad
Los ancianos que viven en residencias asistidas siguen el horario del centro. Con un cuidador a domicilio, pueden despertarse, comer y participar en actividades a su aire. Esta sensación de control mejora el bienestar.
Atena te ayudará a encontrar la mejor asistencia
Elegir la solución asistencial adecuada es importante. Atena se especializa en poner en contacto a familias con cuidadores experimentados que proporcionan seguridad, compañía y cuidados personalizados, todo ello en la comodidad del hogar. Ponte en contacto con nosotros hoy mismo para saber más sobre las opciones de asistencia a domicilio.