La anhedonia es una afección en la que una persona pierde la capacidad de sentir placer por actividades que antes le producían placer. Para las personas mayores, puede ser un problema grave que afecta a su calidad de vida en general. A menudo va de la mano de la depresión, pero también puede darse por sí sola. Comprender la anhedonia y encontrar formas de ayudar a los ancianos a afrontarla es clave para los cuidadores.
Reconocimiento de la anhedonia en los ancianos
Reconocer la anhedonia en los ancianos no siempre es fácil. Entre los síntomas más frecuentes están el desinterés por las aficiones, la reticencia a relacionarse con la familia o los amigos y el desinterés por la comida o las actividades que solían disfrutar. Si el anciano al que cuidas empieza a alejarse de las cosas que antes le hacían feliz, puede ser el momento de actuar.
Impacto en la vida cotidiana
La anhedonia no sólo afecta a la salud emocional. Puede provocar problemas físicos, como movilidad reducida por inactividad o pérdida de peso por falta de apetito. Esto puede crear un ciclo difícil de romper sin ayuda externa. Los ancianos que padecen anhedonia también pueden experimentar falta de motivación para participar en programas de rehabilitación o actos sociales, lo que dificulta aún más la recuperación de lesiones o enfermedades.
Cómo pueden ayudar los cuidadores
- Promover la interacción social
La soledad es un factor importante en la anhedonia. Los cuidadores deben encontrar formas de ayudar a los ancianos a mantenerse en contacto con los demás. Esto puede incluir organizar visitas de familiares, fomentar la participación en actividades de grupo o simplemente mantener conversaciones significativas con regularidad.
- Fomentar la actividad física
Se sabe que el ejercicio mejora el estado de ánimo y aumenta los niveles de energía. Actividades suaves como andar, estiramientos o ejercicios en silla pueden ser eficaces. Los cuidadores pueden motivar a los mayores para que sean activos participando con ellos, haciendo que la actividad sea más agradable y atractiva.
- Introducción de nuevas aficiones
Aunque parezca contrario a la intuición, probar nuevas aficiones o actividades a veces puede reavivar el interés de un anciano. Un cuidador puede sugerir actividades sencillas, como dibujar, tejer o incluso aprender habilidades técnicas básicas para ocupar su mente y sus manos.
- Céntrate en una nutrición adecuada
La anhedonia puede hacer que los ancianos pierdan interés por la comida, lo que conduce a una falta de nutrición adecuada. Los cuidadores deben proporcionar una dieta equilibrada y ofrecer comidas que gusten a los mayores. Probar nuevas recetas o implicar a los mayores en la preparación de las comidas también puede marcar la diferencia.
- Encontrar ayuda profesional
Si la anhedonia persiste en una persona mayor, es esencial ponerse en contacto con un profesional sanitario. Pueden ser necesarias terapias como la terapia cognitivo-conductual (TCC) o la medicación para ayudar a la recuperación. Los cuidadores desempeñan un papel clave en el seguimiento de los cambios y en la colaboración con los médicos para encontrar la mejor forma de actuar.
Atenea está aquí para ayudar
En Atena, sabemos lo importante que es contar con el apoyo adecuado en tiempos difíciles. Tanto si eres una persona mayor que lucha contra la anhedonia como un cuidador que busca orientación, nuestros experimentados profesionales están aquí para ayudarte. Ponemos en contacto a las familias con cuidadores formados que comprenden los problemas complejos de salud mental y están dispuestos a proporcionarles la atención y el ánimo que necesitan. Ponte en contacto con nosotros para encontrar el apoyo que se adapte a tus necesidades.