Si ha pensado en trasladarse a una región distinta de la que vive por motivos de trabajo, ahora es el momento. Cualquier desempleado de una región con pocas oportunidades de empleo que esté dispuesto a encontrar un trabajo de larga duración a menos de 70 kilómetros de su casa puede recibir una contribución financiera del Estado para apoyar la movilidad laboral. Cubrirá el 80% de los gastos de alojamiento durante medio año, hasta un máximo de 250 euros al mes.

Las prestaciones serán abonadas por las oficinas de empleo. La condición es que los solicitantes encuentren un empleo permanente por tiempo indefinido o fijo, pero por un mínimo de seis meses. Esta indemnización no se aplica a los trabajos realizados en el marco de un convenio. Podrá solicitar el subsidio en los tres meses siguientes a la baja en el paro.

Hasta ahora, la ley en vigor permitía a una persona interesada en el subsidio de reubicación solicitar un subsidio de reubicación estatal único de 1.327,76 euros. La condición era que el candidato debía ser residente permanente en la nueva localidad.

Con las diferencias de precios de las propiedades, en lugares con muchas oportunidades de trabajo, sólo un pequeño número de residentes podría comprar una propiedad en su nueva ubicación. Por lo tanto, el interés de la contribución fue mínimo. En 2014 se presentaron 38 candidatos, frente a los 66 de 2013.

En la nueva redacción de la ley, que rebautiza el subsidio como Subsidio de Movilidad Laboral, el subsidio ya no está vinculado a la residencia permanente. El solicitante puede alquilar la vivienda y establecer en ella una residencia temporal.

El texto de la Ley nº. 5/2004 Coll. § 53a Subsidio de apoyo a la movilidad laboral

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