Ya sea para negociar un salario en un nuevo trabajo, para pedir un aumento de sueldo o para negociar un negocio, la negociación es una habilidad que todo profesional necesita, pero no es tan fácil como parece.
Puede llevar mucho tiempo llegar a un acuerdo, independientemente de lo que se negocie, y al final puede que ni siquiera se consiga lo que se quiere. Por lo tanto, es importante asegurarse de que se hace todo de la manera correcta. Incluso los errores más pequeños pueden costar el éxito.
¿Quiere convertirse en un líder de las negociaciones? Aquí tienes 5 consejos que te ayudarán a conseguirlo.
- 1. No hagas suposiciones
La clave de una negociación exitosa es estar preparado. Esto significa mucho más que conocer las cifras y los hechos. Esto significa que hay que saber quién es el responsable de la toma de decisiones y cuáles son las necesidades, valores, esperanzas y temores de la otra parte. También significa no asumir que algo no es negociable de antemano.
«Si no te preparas, te preparas para fracasar»
Mike Murdock
- 2. No se apresure
Las negociaciones llevan tiempo, sobre todo si quieres que vayan bien. Tómese el tiempo necesario para establecer una verdadera relación con la otra parte. Comparta un dato personal que indique su apertura y deseo de conectar. Si lo haces, la negociación puede pasar de ser una pelea hostil a una conversación productiva. No tengas miedo de incorporar pausas, ya que pueden ayudar a todos a recuperar la perspectiva y eliminar las emociones indebidas.
- 3. No te tomes nada como algo personal
Puede ser fácil dejarse llevar por las emociones durante una negociación, especialmente si se trata de algo que le afecta personalmente. Pero ten cuidado: demasiada emoción puede perjudicar tu productividad. Desafíate a convertir los momentos en los que te sientes desafiado y a la defensiva en momentos de curiosidad en los que puedes obtener retroalimentación. Las emociones pueden utilizarse fácilmente en su contra en las negociaciones.
- 4. No aceptes un mal trato
La negociación es un proceso largo, tedioso y estresante, pero aceptar un trato sólo por conseguirlo no es bueno, sea cual sea el lado en el que te encuentres. Es importante recordar que algún acuerdo no es necesariamente mejor que ninguno.
- 5. No negociar
Si tienes la suerte de tener la ventaja durante la negociación, no la aproveches demasiado. Piensa de antemano en las consecuencias de un regateo excesivo. No te pongas en una situación en la que no puedas volver atrás porque hayas negociado demasiado.