Un tema candente hoy en día es la división generacional en el lugar de trabajo. Cada generación tiene hábitos, capacidades, expectativas y exigencias diferentes. Debido a estas diferencias, a menudo surgen tensiones en el lugar de trabajo, que afectan negativamente no sólo a las relaciones interpersonales, sino también al ambiente general de la empresa o a la productividad de los empleados.

Las generaciones pueden considerarse como una de las tendencias demográficas que han influido y seguirán influyendo en el mercado laboral. La evolución demográfica adversa también está asociada actualmente a los riesgos del mercado laboral. Conocer a sus empleados y su estilo de pensamiento se convierte en una ventaja en un entorno altamente competitivo. Si los empresarios utilizan las características de las generaciones para conocer mejor a sus empleados, pueden adaptar el entorno de trabajo a ellos y así hacer más eficiente su trabajo.

La generación X creció sin tecnología, pero tuvo que aprender a vivir con ella

Internet les llegó cuando ya estaban o se estaban incorporando al mercado laboral. Se trata de un grupo de personas que sigue prefiriendo todo en papel antes que en un smartphone. Cuando tienen uno, lo utilizan principalmente para hacer llamadas telefónicas y enviar mensajes de texto. Sin embargo, lo cierto es que los más jóvenes de esta generación también han aprendido a utilizar Internet y las aplicaciones móviles.

Se trata de una generación más tolerante, abierta, independiente y autosuficiente que, debido a la ajetreada vida laboral de sus padres (los baby boomers de los años 1940-1960), se ha acostumbrado a resolver todos sus propios problemas y asuntos durante su infancia. Hacen su trabajo lo mejor que pueden, pero tiene que encajar con su vida privada. Los empleados de esta generación no están dispuestos a trabajar a costa de sus familias. En el trabajo, necesitan sentir que son responsables de sus tareas. No les gusta que les controlen constantemente. Para que la comunicación con ellos tenga éxito, es aconsejable ser breve y conciso y se recomienda una reunión cara a cara o un contacto telefónico.

DATO INTERESANTE: La Generación X ve a su jefe ideal como alguien que sabe apreciar su trabajo. Los millennials querrían tener como supervisor a un mentor que sea también un amigo. Los yernos, en cambio, se imaginan a sí mismos o a un miembro de la familia como el jefe, que no les controlaría, restringiría o provocaría.

Para retener a los trabajadores de esta generación, los directivos deben recordar que tienen que darles el espacio necesario para trabajar de forma independiente. En el trabajo, la Generación X acepta los consejos de los empleados más experimentados, pero quiere ser responsable de su propio trabajo. Las tareas que se les asignan, las hacen lo mejor que pueden. Su trabajo debe ser compatible con su vida privada. De lo contrario, su rendimiento en el trabajo no será eficaz o decidirá dejar el trabajo.

La generación Y es la más educada

Han crecido a la par que la evolución de la tecnología, por lo que representan un importante punto de inflexión en el mundo online y offline. Sus vidas están fuertemente conectadas a la tecnología moderna, y saben lo que es vivir sin smartphones y sin contacto diario con la realidad virtual.

La Generación Y es segura de sí misma, ambiciosa, domina las lenguas extranjeras y está orientada al rendimiento. Tiene grandes expectativas respecto a su empleador. Estas personas anhelan proyectos significativos. Cuando es necesario, no distinguen entre horas de trabajo y tiempo libre. A los millennials les gusta trabajar en equipo, pero requieren un líder de equipo. Son pragmáticos y multitarea, pero están menos interesados en la política y el medio ambiente que cualquier otra generación anterior. No tienen ningún problema en trabajar horas extras siempre que se les compense adecuadamente por ello. No tienen problema en viajar por trabajo, pero no les gusta ajustarse a valores en los que ellos mismos no creen.

DATO INTERESANTE: Las generaciones X e Y son actualmente el mayor grupo de trabajo. Si los empresarios pudieran entender mejor cómo funcionan, los retendrían.

Muchos hijos de millennials han visto a sus padres estresados trabajando en grandes empresas día y noche. Por lo tanto, es típico que encuentren un equilibrio entre el trabajo y la vida privada. Respetan a sus padres por el trabajo que han hecho por el mundo, pero no quieren vivir de forma similar. No quieren sacrificar su vida sólo por el trabajo, porque valoran mucho la familia y las relaciones de pareja.

La Generación Z es el pueblo digital por excelencia

Se trata de una generación que ya ha nacido con conocimientos de tecnología. Están acostumbrados a encontrar el mundo entero en su móvil. Son activos, buscan información y son exigentes con la calidad. Ya tienen un gran poder adquisitivo y éste aumentará, por lo que las marcas no pueden ignorarlos. No separan estrictamente la experiencia virtual de la real, y también quieren divertirse mientras trabajan o aprenden.

Este grupo de personas es independiente y trata de utilizar sus habilidades al máximo. Encuentran el trabajo de forma intuitiva y permanecen en él sólo mientras les satisface. Son capaces de pedir a su empleador beneficios que las generaciones mayores no se atreverían a pedir (horarios flexibles, trabajo desde casa, mayor compensación económica). Muchos no piensan en su futuro laboral. Sin embargo, hay un flujo constante de ofertas de trabajo en el mercado laboral que intentan atraer a estos jóvenes. Se está convirtiendo en un motor para muchas empresas, que se ven obligadas a centrarse cada vez más en la digitalización para complacer a los jóvenes y estar a su altura.

DATO INTERESANTE: A partir del 46. países en los que a muchos de esta generación les gustaría trabajar después del instituto. El 15% vería con buenos ojos esta opción de inmediato, y otro 47% la consideraría. Lo cual es muy diferente a la Generación X e Y, donde la universidad era la opción obvia si tenían el dinero. La Generación Z quiere aprovechar más la formación de los empleadores y adquirir más experiencia laboral.

Se espera que la Generación Z tenga un fuerte espíritu emprendedor. La mayoría prefiere tener su propio negocio antes que ser un empleado. Los empresarios también pueden utilizar esto como una ventaja. Pueden «incrustar» el espíritu empresarial en sus culturas corporativas, apoyar el desarrollo personal de los empleados y comunicar mejor la contribución de los individuos al resultado final.

La generación Alpha es nuestro futuro

Los niños de esta generación todavía están en preescolar. Cuando nacieron, el mundo ya estaba dominado por los smartphones, las redes sociales y la palabra «app» es quizás la base de sus vidas. Sin embargo, se espera que esta generación sea la más disruptiva de la historia moderna.

Se estima que la generación Alfa será la más vieja y rica. Los últimos que aún caerán en la generación vendrán al mundo en 2025. La generación Alfa será la que tome en gran medida las decisiones financieras en el hogar. Es bastante probable que sigan el ejemplo de sus padres de estar abiertos al multiculturalismo y rechazar los estereotipos de género. También se supone que será la generación más educada. No verán la tecnología sólo como un complemento, sino que se convertirá en una parte integral de sus vidas.

Al mismo tiempo, será la generación que más rápido cambie, ya que la tecnología cambia cada día y los niños ya se están adaptando a ella a un ritmo vertiginoso. Esta nueva generación no considerará la tecnología como una herramienta, sino que la integrará en su vida de forma extraordinaria. Cómo será la generación Alfa en el mercado de trabajo se mostrará por las tecnologías que utilicen, que luego se reflejarán en sus personalidades.